Catechetical Ministries in Motion: New PCL Ministry Boot Camp

This past weekend we hosted our annual Ministry Boot Camp for new parish catechetical leaders at Santa Teresita Youth Conference Center in Three Rivers. We would like to thank all the ministry leaders that attended, the conference center staffs, along with Safe Environment Coordinator of the Diocese of Fresno, Lucia Magaña, that accompanied us and shared a talk on Safe Environment.

This annual Ministry Boot Camp is focused on supporting new ministry leaders with guidance and resources on subjects that pertain specifically to their parish leadership role as directors, coordinators, or ministry leaders. Even though the topics are focused specifically on supporting new leaders in adapting to their new roles we always open the invitation to ministry leaders that have been serving for many years as well. Topics such as Building Community and Prayer, Forming Catechists, Effective Communication, Event and Function Forms, Time Management, and Developing a Program along with Catechists Recruitment serve as a bases of guidance and understanding in which a new ministry leader will hopefully be able to apply the knowledge and information they received and support the ministries under their care with more efficiency.

As new leaders to any ministry or role that has been granted to us in our parishes we must always seek to form and inform ourselves as much as possible in order to more easily attend to the needs of those we minister. This concept should also apply to leaders that have been serving for years as the reality is that we never know when a situation might occur in which the way we minister and lead our ministries can change dramatically.

Leadership is more than surviving the next ministry program season or making it through another staff meeting or responding to yet another crisis and putting out fires. Leadership should be able to see the bigger picture and look to the present needs along with future needs and points the direction in which to go. Leadership should be able to lift people up and help them to achieve their God-given potential. Leadership should be able to encourage people to work together in teams and yet can get out of the way to help others use their ministry gifts. Leadership should be able to cling to faith when others get nervous or lose it.

Leadership formation should include programming and resources that help those they lead to deepen a sense of personal spirituality, as they gain an appreciation for the mission, values, charisms, and rich heritage of the faithful community in which they serve.

By engaging in ministry formation, leaders are more connected to the mission and values of their parish community. This deeper connection supports their competency to articulate mission integration and lead the ministries of the faithful, the Lord’s people. Our team or group members and families, and all with whom we work will experience the healing ministry of Jesus, as we grow and mature as leaders, as our Lord and Savior would have expected us to do.

(2 Peter 3:18) But grow in the grace and knowledge of our Lord and Savior Jesus Christ. To him be the glory both now and forever. Amen.

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Ministerios Catequéticos en Movimiento: Campamento de entrenamiento del ministerio para nuevos lideres de la parroquia

El fin de semana pasado organizamos nuestro campamento anual de entrenamiento ministerial para nuevos líderes catequéticos parroquiales en el Centro de Conferencias Juveniles de Santa Teresita en Tres Ríos. Nos gustaría agradecer a todos los líderes del ministerio que asistieron, al personal del centro de conferencias, junto con la Coordinadora de Ambiente Seguro de la Diócesis de Fresno, Lucía Magaña, que nos acompañó y compartió una plática sobre el Ambiente Seguro.

Este campamento anual de entrenamiento ministerial se centra en apoyar a los nuevos líderes ministeriales con orientación y recursos sobre temas que pertenecen específicamente a su papel de liderazgo parroquial como directores, coordinadores o líderes ministeriales. A pesar de que los temas se centran específicamente en apoyar a los nuevos líderes en la adaptación a sus nuevas posiciones, siempre abrimos la invitación a los líderes ministeriales que también han estado sirviendo durante muchos años. Temas como La Construcción de la Comunidad y la Oración, La Formación de Catequistas, La Comunicación Efectiva, Los Formularios de Eventos y Funciones, La Gestión del Tiempo y El Desarrollo de un Programa junto con el Reclutamiento de Catequistas sirven como una base de orientación y comprensión en la que se espera que un nuevo líder ministerial pueda aplicar el conocimiento y la información que recibió y apoyar a los ministerios bajo su cuidado con más eficiencia.

Como nuevos líderes de cualquier ministerio o papel que se nos haya otorgado en nuestras parroquias, siempre debemos buscar formarnos e informarnos tanto como sea posible para atender más fácilmente las necesidades de aquellos a quienes ministramos. Este concepto también debe aplicarse a los líderes que han estado sirviendo durante años, ya que la realidad es que nunca sabemos cuándo puede ocurrir una situación en la que la forma en que ministramos y dirigimos nuestros ministerios pueda cambiar dramáticamente.

El liderazgo es más que sobrevivir la próxima temporada del programa ministerial o superar otra reunión de personal o responder a otra crisis y apagar incendios. El liderazgo debe ser capaz de ver el panorama general y mirar a las necesidades presentes junto con las necesidades futuras y señalar la dirección en la que ir. El liderazgo debe ser capaz de elevar a las personas y ayudarlas a alcanzar su potencial dado por Dios. El liderazgo debe ser capaz de alentar a las personas a trabajar juntas en equipos y, sin embargo, puede hacerse a un lado para ayudar a otros a usar sus dones ministeriales. El liderazgo debe ser capaz de aferrarse a la fe cuando otros se ponen nerviosos o la pierden.

La formación de liderazgo debe incluir programación y recursos que ayuden a aquellos a quienes dirigen a profundizar un sentido de espiritualidad personal, a medida que adquieren un aprecio por la misión, los valores, los carismas y la rica herencia de la comunidad de fieles en la que sirven.

Al participar en la formación ministerial, los líderes están más conectados con la misión y los valores de su comunidad parroquial. Esta conexión más profunda apoya su competencia para articular la integración misionera y dirigir los ministerios de los fieles, el pueblo del Señor. Los miembros y las familias de nuestro equipo o grupo, y todos con quienes trabajamos, experimentarán el ministerio de sanación de Jesús, a medida que crezcamos y maduremos como líderes, como nuestro Señor y Salvador hubiera esperado que hiciéramos.

(2 Pedro 3:18) Y crezcan en gracia y en conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él la gloria ahora y por siempre. Amén.