Article by Roman Flores, Catechetical Ministry Coordinator
We are about to end the liturgical year and that means we begin a new one with Advent. This season of preparation for the coming of our Savior should be done as a family. If our children are young, it is sometimes difficult for them to fully understand the meaning of Advent. That is why it is important that we explain to them that Advent means a journey of preparation, that we must spend the following weeks with a different attitude to prepare our hearts and make them worthy so that baby Jesus can dwell there.
If our children are older, we can explain to them that it is necessary to work to improve our way of being and that we must also offer all our efforts so that Jesus is the master of our life.
Another important point is that we must create awareness in our children that the event that is going to take place on the night of December 24, is the birth of our Savior and that for the same reason it is the birthday of Jesus, so each one of us must give him a gift that night and that is why we prepare during that time, to give the best gift of ourselves which is a pure heart.
It is very important that we are also clear about what Advent is to be consistent with what we are saying to our children. Of course, we can plan a series of actions to do as a family throughout Advent. If we start Advent with a program of activities to do with the family, it will be easier for us to experience a more intense Advent and better focused on arriving well prepared for Christmas.
We can make a calendar with these activities, and we can ask our children to help us say what activities we are going to do each day. Then we can put them in plain sight for everyone in the house, it can be in a calendar of large pictures or in a small chest of drawers for everyone to use, it is just a matter of imagination and thinking about what our children like the most about this season.
Be mindful though, if possible, we should think of activities that all members of the family can do or participate in. They should be simple activities and crafts, but also be able to help us prepare our hearts for the birth of our Lord. They can also encompass all aspects of family life, tradition, and culture.
As a family as we prepare for the coming celebration of the birth of our Savior it's about acknowledging our weaknesses and overcoming them; it's about being better people to be more pleasing in God's eyes.
It is not possible to carry out these activities if we are not the protagonists of this change, our children must see us active in carrying out the activities that we proposed to carry out day by day.
It is important that we do it cheerfully and not deny it because our children are learning more from our attitudes than from our words and that is how they will face the activity.
Advent can be a great opportunity to iron out rough edges, forgive, correct faults, or increase our demonstrations of family affection and piety and this helps us a lot to grow as a family.
My brothers and sisters in Christ may God bless you and your families this coming Advent and Christmas Season!
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Catequesis a la Rapidez: Actividades de Adviento con la Familia
-Roman
Estamos a punto de terminar el año litúrgico y eso significa que comenzamos uno nuevo con el Adviento. Esta temporada de preparación para la venida de nuestro Salvador debe hacerse en familia. Si nuestros hijos son pequeños, a veces les cuesta entender plenamente el significado del Adviento. Por eso es importante que les expliquemos que el Adviento significa un camino de preparación, que debemos pasar las siguientes semanas con una actitud diferente para preparar nuestros corazones y hacerlos dignos para que el niño Jesús pueda habitar allí.
Si nuestros hijos son mayores, podemos explicarles que es necesario trabajar para mejorar nuestra forma de ser y que también debemos ofrecer todo nuestro esfuerzo para que Jesús sea el dueño de nuestra vida.
Otro punto importante es que debemos crear conciencia en nuestros hijos de que el evento que se va a llevar a cabo la noche del 24 de diciembre es el nacimiento de nuestro Salvador y que por la misma razón es el cumpleaños de Jesús, por lo que cada uno de nosotros debemos darle un regalo esa noche y es por eso que nos preparamos durante ese tiempo, para dar el mejor regalo de nosotros mismos, que es un corazón puro.
Es muy importante que también tengamos claro qué es el Adviento para ser coherentes con lo que estamos diciendo a nuestros hijos. Por supuesto, podemos planificar una serie de acciones para hacer en familia a lo largo del Adviento. Si iniciamos el Adviento con un programa de actividades para hacer en familia, nos será más fácil vivir un Adviento más intenso y mejor enfocado a llegar bien preparados para la Navidad.
Podemos hacer un calendario con estas actividades, y podemos pedir a nuestros hijos que nos ayuden a decir qué actividades vamos a hacer cada día. Luego podemos ponerlos a la vista de todos en la casa, puede ser en un calendario de cuadros grandes o en una pequeña cómoda para que todos los usen, solo es cuestión de imaginación y pensar en qué es lo que más les gusta a nuestros hijos de esta temporada.
Sin embargo, si es posible, debemos pensar en actividades que todos los miembros de la familia puedan hacer o en las que puedan participar. Deben ser actividades sencillas y manualidades, pero también deben ayudarnos a preparar nuestros corazones para el nacimiento de nuestro Señor. También pueden abarcar todos los aspectos de la vida familiar, la tradición y la cultura.
Como familia, mientras nos preparamos para la próxima celebración del nacimiento de nuestro Salvador, se trata de reconocer nuestras debilidades y superarlas; se trata de ser mejores personas para ser más agradables a los ojos de Dios.
No es posible realizar estas actividades si no somos los protagonistas de este cambio, nuestros hijos deben vernos activos en la realización de las actividades que nos propusimos realizar día a día.
Es importante que lo hagamos con alegría y no lo neguemos porque nuestros hijos están aprendiendo más de nuestras actitudes que de nuestras palabras y así es como afrontarán la actividad.
El Adviento puede ser una gran oportunidad para limar asperezas, perdonar, corregir faltas o aumentar nuestras demostraciones de afecto y piedad familiar y esto nos ayuda mucho a crecer como familia.
Mis hermanos y hermanas en Cristo, ¡que Dios los bendiga a ustedes y a sus familias en este próximo Adviento y Navidad!