By: Roman Flores, Catechetical Ministries Coordinator
1. Community of Prayer
When we become a praying community, we become one voice that not only seeks the Lord's guidance, but also seeks to put it into practice as one community, as one body of Christ in which new believers can feel supported and accepted. The community that prays together remains together.
2. Live the Word of God
It is essential for those whom we catechize to learn to read the bible and listen to the Word of God, but more important to live it. Allow new believers to see the Word of God in you and reflected through your actions not just through words.
3. Build Relationships and Create Community
Share your lives with new believers, being open and honest about right and wrong, as well as what God is teaching us. Get them involved in your community, work together, and become friends. Encourage and support new believers in this new stage of life.
4. Encourage faith sharing
It's never too early to encourage new believers to talk to others about how God has changed their lives. This will help solidify the faith and show how God is working. When we share our faith with others, we teach them how to share the gospel, the Good News.
5. Do not forget the Holy Spirit
The role of the Holy Spirit is essential, it is crucial, to fully realize the potential in any person and in any situation. We need to help new believers and those we catechize understand who the Holy Spirit is and what it means to walk in the transforming power of the Spirit, not in their own power, but in the power of God's grace.
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Catequesis a la Rápides: Simple pasos para llegar a los nuevos creyentes como comunidad
1. Comunidad de oración
Cuando nos convertimos en una comunidad de oración, nos convertimos en una sola voz que no solo busca la guía del Señor, sino que también busca ponerla en práctica como una comunidad, como un cuerpo de Cristo en el que los nuevos creyentes pueden sentirse apoyados y aceptados. La comunidad que ora junta permanece unida.
2. Vive la Palabra de Dios
Es esencial que aquellos a quienes catequizamos aprendan a leer la biblia y a escuchar la Palabra de Dios, pero más importante es vivirla. Permitan que los nuevos creyentes vean la Palabra de Dios en ustedes y se refleje a través de sus acciones, no solo a través de las palabras.
3. Construir relaciones y crear comunidad
Compartan sus vidas con nuevos creyentes, siendo abiertos y honestos sobre el bien y el mal, así como sobre lo que Dios nos está enseñando. Inviten a que se involucren en sus comunidades, trabajen juntos y conviértanse en amigos. Animen y apoyen a los nuevos creyentes en esta nueva etapa de la vida.
4. Fomentar el intercambio de fe
Nunca es demasiado pronto para alentar a los nuevos creyentes a hablar con otros acerca de cómo Dios ha cambiado sus vidas. Esto ayudará a solidificar la fe y mostrará cómo Dios está obrando. Cuando compartimos nuestra fe con los demás, les enseñamos cómo compartir el Evangelio, las Buenas Nuevas.
5. No te olvides del Espíritu Santo
El papel del Espíritu Santo es esencial, es crucial, para realizar plenamente el potencial en cualquier persona y en cualquier situación. Necesitamos ayudar a los nuevos creyentes y a aquellos a quienes catequizamos a entender quién es el Espíritu Santo y lo que significa caminar en el poder transformador del Espíritu, no en su propio poder, sino en el poder de la gracia de Dios.